En tus brazos de ensueños me abandono,
en un mundo de amores y pasiones,
tú eres la musa ideal que yo pregono,
en los bellos versos que contienes.
Y es que eres intangible y luminosa,
ninfa envuelta en el misterio,
que te tornas a veces caprichosa,
e iluminas al poeta a tu antojo,
Y por eso cuando te busca el poeta,
jamás te encuentra en su camino,
eres tú la que al azar le encuentras,
y juegas con su inspiración a tu capricho.
¿Es que el genio ni la ciencia,
pueden encontrarte cuando quieren;
o es que tú sólo te presentas,
al corazón sensible que te siente?
Es la inspiración la que me dicta;
que mientras haya una flor, amores y poesia,
y mientras una mujer hermosa exista
seguirá viva e inmortal la lira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario